A lo largo de la historia de la humanidad, los esfuerzos para planificar, evitar o retrasar el embarazo han sido una lucha importante. Hoy, esos desafíos cambiaron y se convirtió en una obligación de derechos humanos para todos los países, gobiernos y legisladores.
El documento final de la "Proclamación de Teherán", declaró inequívocamente que: "Los padres tienen el derecho humano básico de determinar libremente el número de sus hijos y los intervalos entre los nacimientos".
Todas las personas tenemos el derecho de decidir en forma autónoma y sin discriminación si queremos o no tener hijos, con quien y cuantos y en cuanto tiempo. También es un derecho recibir información correcta sobre cada uno de los métodos anticonceptivos y el acceso al método elegido.
Ampliar el acceso a la planificación familiar salva decenas de miles de vidas cada año, evita embarazos no deseados y reduce el número de abortos, así como la incidencia de muertes y discapacidades relacionadas con el embarazo y el parto.
Métodos y Mecanismos de acción
¿Mitos o realidades? Contestamos las preguntas que te podés hacer.
• Los métodos naturales (cuidarte con los días) no son aconsejados para adolescentes porque son poco efectivos y requieren una gran motivación y cuidado por parte de quien lo usa. REALIDAD
• Los preservativos pueden tener microporos por donde pase el virus del VIH. Por ello no son seguros para prevenir las enfermedades de transmisión sexual. MITO
• Las píldoras anticonceptivas no deben indicarse en adolescentes de menos de 13 años de edad ginecológica (o del inicio de sus menstruaciones). MITO
• El primer mes de uso de la píldora hay que cuidarse con otro método anticonceptivo porque no es efectivo. MITO
• Los parches transdérmicos y los anillos vaginales son una buena indicación para las adolescentes que se olvidan de la toma diaria de las pastillas. REALIDAD
• Las adolescentes que están amamantando pueden tomar anticonceptivos hormonales que no afecten la lactancia ni al bebé. REALIDAD
• Con el uso de los métodos anticonceptivos hormonales hay que hacer descansos periódicos para que no produzcan efectos adversos. MITO
• Hay medicamentos que disminuyen la efectividad de los anticonceptivos hormonales. REALIDAD
• En adolescentes que nunca han tenido hijos no es conveniente que usen D.I.U. porque pueden favorecer las infecciones que puedan provocar esterilidad. MITO
• La anticoncepción quirúrgica en la adolescencia sólo está contemplada en casos muy especiales: enfermedades que se agraven con el embarazo, patología mental severa o enfermedades que se puedan transmitir a los hijos. REALIDAD
• La píldora del día después es abortiva. MITO
• Durante la primera relación sexual no voy a quedar embarazada. MITO
• Si tengo relaciones sexuales esporádicas no voy a quedar embarazada. MITO
• Sólo debo utilizar la píldora los días que tengo relaciones. MITO
• Se debe suspender una vez al año. MITO
• Después de suspendida hay que esperar un tiempo para buscar un embarazo. MITO
• Las píldoras anticonceptivas producen cáncer. MITO. Las píldoras anticonceptivas no causan cáncer. De hecho, pueden reducir el riesgo de sufrir ciertos tipos de cáncer. Según la Sociedad Americana Contra el Cáncer, los estudios han encontrado que las píldoras anticonceptivas (tanto con estrógeno como con progesterona) pueden reducir el riesgo de cáncer de ovario y de endometrio
• El implante subdérmico se puede ver MITO: es un método anticonceptivo discreto. Una vez que el moretón de la inserción del implante haya desaparecido, no debe notarse debajo de la piel.