El cáncer de piel es el tipo de tumor más frecuente. Se produce por el crecimiento anormal y descontrolado de células cutáneas que se han alterado generalmente por la radiación ultravioleta (UV) procedente de la luz solar o de las camas de bronceado, por eso se suele manifestar con mayor frecuencia en la piel expuesta al sol.
TIPOS DE CÁNCER DE PIEL
Los principales tipos de cáncer de piel son: carcinoma de células basales, carcinoma de células escamosas y melanoma.
CARCINOMA DE CÉLULAS BASALES
El carcinoma de células basales es la forma más frecuente de cáncer de piel. Su incidencia está aumentando en un 10% anual. Prácticamente todos aparecen en áreas del cuerpo expuestas al sol, sobre todo, en cara, orejas, cuero cabelludo, hombros y espalda. Se producen por crecimiento de las células basales que se sitúan en la capa más profunda de la epidermis (la capa más superficial de la piel). No tiene capacidad de dar metástasis, aunque puede ser invasivo localmente por su crecimiento lento pero progresivo.
CARCINOMA DE CÉLULAS ESCAMOSAS O ESPINOCELULAR
El Carcinoma de Células Escamosas es el segundo cáncer de piel más frecuente. Supone el 20-25% de los tumores malignos cutáneos. En los últimos 20 años esta incidencia ha aumentado en casi todos los países, debido a la mayor exposición a la luz solar y a los cambios en el estilo de vestirse.
Se producen por crecimiento anómalo de las células escamosas, los queratinocitos, que conforman casi toda la capa más exterior de la piel (epidermis).
Tienen el aspecto de heridas con costra y bordes sobreelevados que sangran fácilmente. Pueden aparecer en cualquier parte del cuerpo, aunque suelen darse en áreas que suelen estar expuestas a la luz UV como, por ejemplo, orejas, cara, cuero cabelludo, manos, brazos y piernas. El daño provocado por la exposición solar en las células es acumulativo, por lo que el riesgo de padecer este cáncer se incrementa con la edad y el tiempo de exposición UV. Es un tumor con capacidad para diseminarse a distancia, pero esto es infrecuente y solo ocurre en casos muy avanzados.
MELANOMA
El melanoma es un tumor mucho menos frecuente que los otros tipos de cáncer de piel, pero es más agresivo, por lo que es más probable que invada el tejido sano que lo rodea y se disemine a otras partes del cuerpo.
Melanoma es el nombre genérico de los tumores melánicos o pigmentados. A pesar de que la mayoría de los melanomas se originan en la piel, por ejemplo, en el tronco o en las extremidades, también pueden aparecer en otras superficies del cuerpo (como la mucosa de la boca, del recto o de la vagina, o la capa coroides del interior de nuestros ojos.
El sol es el factor de riesgo principal. Exponerse a la radiación solar o las cabinas de autobronceado sin fotoprotección es como conducir sin cinturón de seguridad, ya que las posibilidades de contraer un cáncer de piel se multiplican.
La clave es el diagnóstico precoz, los nuevos métodos diagnósticos facilitan la detección del cáncer de piel.
PREVENCIÓN
La principal medida preventiva es la protección frente a la radiación solar y las fuentes artificiales de rayos UVA, fundamentalmente las cabinas bronceadoras de rayos UVA.
Es importante, además, que se realicen consultas periódicas con el dermatólogo y acudir en el caso de detectar manchas o cambios de forma o color en las lesiones de piel.